CUENTAS EN ROJO


Me ha sucedido a lo largo de mi vida. El balance de mi economía siempre ha sido desfavorable. Las cuentas siempre han estado en rojo, inflando las deudas, exasperando los ánimos, afligiendo las esperanzas. Dando por tierra con lo que cuesta tanto construir, en un abrir y cerrar de ojos.

He de ser honesto: los créditos han sido la causa principal de mis desvelos y ansiedades. Nada peor que la fecha que llega para pagar la cuota de tal ó cual préstamo, y saber que no hay conqué. Dios no quiere que le honremos?. Porqué el Señor nos hace llegar hasta el límite a veces para pagar los compromisos adquiridos?. Cuántas veces hemos pagado en intereses de intereses pequeñas fortunas, sueldos enteros?.

LA VERDAD


1º Juan 1:6

Juan, ese viejito cariñoso, es inspirado aquí por Dios mismo para ser durísimo con nosotros, con el propósito de sincerarnos y mantenernos en la verdad en base a conceptos elementales del Camino del creyente.

Permítame tomar el texto a la inversa:

Si no PRACTICAMOS la VERDAD, mentimos. Si mentimos, andamos en tinieblas. Si andamos en tinieblas, NO TENEMOS comunión con Él.

EL ESPÍRITU SANTO TENDRÁ PODER?


El Espíritu Santo de Dios, aquél que se movía sobre la faz de las aguas en el principio de todas las cosas; aquél que fue prometido venir de lo alto en las antiguas escrituras; aquél que tomó forma de paloma al descender de los mismos cielos sobre Jesús; aquél del cual Jesús nuestro Señor habló y dijo de Él que era el "otro consolador" que habría de venir a revelar todas las cosas, tomando de lo que Jesús le dió; aquél que fue prometido MORAR en nuestras miserables personas por la Gracia infinita de Dios, como garantía de sus promesas...

Cenizas


Puede mi vida ser como ceniza
el resto de algo que fue, el presente magro de algo que ya no existe
Puede ser gris y pretender no servir para nada
incluso pudiera hacerme creer que mi vida solo será despojos para siempre
que solo seré a medias, talvez ni siquiera un recuerdo pusilánime de mi

La Senda fácil


Señor si vos ya hiciste el camino
si ya marcaste la senda, si ya dejaste tus huellas
Señor, si vos quitaste las piedras
si ahuyentaste los lobos, y pusiste el sol en medio del cielo
para iluminar nuestra oscuridad
Señor si sos como el faro en la noche oscura
alumbrando el camino de los perdidos
confirmando la ruta de los redimidos
Señor solo quiero entonces mirarte a vos
porque se que solo vos no te has equivocado
tengo certeza que sos el creador de la senda
y el que pisó en el lugar correcto
entonces solo me queda imitarte
para no quedar empantanado, para no sentirme abandonado
para no perder el rumbo ni dar rodeos innecesarios
para ir a paso firme al encuentro con vos con la mirada ancha
y los ojos brillantes de una vida honrosa a tu presencia santa
Señor yo quiero ser parte del camino y que quien viene detrás
pueda seguir tu destino sin ningún titubear, con la certeza que da
de ver al creyente en la senda, gozando de su Señor, caminando recto
derechito en este valle de sombras hacia una luz infinita
el resplandor de tu persona hace fácil la vía brava Señor.
Gracias, por ser el camino, la senda, la pisada, el rumbo, el destino.
Gracias por ser TODO, y dejarme a mí ser algo...tan humildemente pequeño
que te necesite a cada paso.

 Te amo. Mariano Spinardi.

Iluminados por Él



Mientras escuchaba “You”, de Hillsong, pensaba lo grandioso de dejarse llevar por la chispa divina de la inspiración, iluminación, ó como quieran llamarle algunos teólogos.
Pensaba, qué distinta a la oscuridad es la luz del Señor. Y pensaba, qué simple y fácil es perder el rumbo y meterse en tinieblas. Caminar por el valle oscuro es la condición natural de la carne, que tiene un peso mucho más denso que el etéreo espíritu del hombre.

Poco, Mucho



Jesús nos dice en Lucas 7 que, a quien mucho se le ha perdonado, ama mucho. Quien siente que se le ha perdonado poco, poco ama.

También lo ejemplifica el Señor en ocasión de los dos deudores. El problema nuestro es qué medida de perdón creemos que recibimos. Qué gravedad creemos que han tenido ó tienen nuestras faltas y pecados.