Tiempo de Decisiones


Todo nuestro tiempo en esta vida estamos tomando decisiones. Decisiones que están relacionadas solo con nostros mismos, y decisiones que involucran a los demás, a los cercanos. En un mundo donde Dios nos puso para interactuar con el prójimo, nuestras decisiones mayormente afectan sin lugar a dudas a otros.

El problema de semejante responsabilidad, es bajo qué fuerza ó pensando en quién tomamos tales determinaciones. Me viene a la mente el carcelero de Hechos 16:31
"Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo tú, y tu casa."

 El aparente "problema" de este versículo es como ha sido interpretado por algunas doctrinas. Mientras que muchos, aquí, ven la salida para sus familiares inconversos, y, erróneamente, consideran que la conversión es "popular" ó en masa - tú y tu casa - otros, más acertadamente, vemos que realmente, la fuerza del versículo está en "creé vos", luego, tu casa estará preparada, santificada por vos, para que tal cual vos lo hiciste, ellos también crean y se conviertan. Si tomamos aisladamente el versículo para enseñar sobre la doctrina de salvación, estamos cometiendo un error. Tomando una mala decisión. Aislamos todos los otros muchísimos versículos que nos enseñan que la salvación es absolutamente personal.

Juan 3:16
"Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a Su Hijo unigénito (único), para que todo aquél que cree en El, no se pierda, sino que tenga vida eterna". Todo aquél. Cada uno.

Juan 3:18
"El que cree en El no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios".

Extraordinariamente claro!. Podés ver como se trata de una decisión personal?. "Todo aquél que no cree...". Se puede comprender claramente que no seré salvo por medio de mi padre, madre, hermano ó familiar ninguno, si YO no creo.

Decisiones. Por supuesto que no es lo mismo decidir qué almuerzo comeremos hoy, que decidir sobre cuál es el momento indicado para hablar con mis hijas menores sobre los peligros de internet, sobre las adiciones, sobre el sexo, y sobre el plan de Dios para sus vidas.

Bajo la guía del Altísimo, considero que lo más prudente - luego de haber cometido tantísimos errores en este campo - es comenzar a "liberar información" de acuerdo a la etapa de vida de los niños. Hay información que no pueden absorber, sencillamente porque no es solo la información lo que hay que dar, sino que hay que interactuar con el mundo lo suficiente como para comprender el significado de esa información.

"Hija, no te drogues. Es malo, el Señor no quiere". "Bueno,pa." Cuatro días después vuelve a mí y me pregunta, "pa, qué es droga??". Entonces caigo en que he tomado una mala decisión. Importante información fue entregada de forma vaga e irresponsable, la preocupación que puse sobre sus hombros la tuvo cuatro días divagando vaya a saber qué cosas, etc.

En este hipotético caso, la cuestión funcionó así. En otros podría ser: "si papá, ya me se todo esto porque lo vi en internet"...esto, hija, y qué más te sabés por internet???. Fue una buena decisión poner internet en la casa?. Navegan conmigo a su lado?. Tengo control parental sobre la pc?. He hablado con ellas sobre los peligros propios del uso de la red?.
Decisiones.

El problema de las decisiones, hablando de cristianos, es que sigamos pensando egoístamente que las decisiones que tomamos nos van a afectar tan solamente a nosotros, y nunca a quienes están a nuestro alrededor.

Otro ejemplo: "Se me da la posibilidad de cambiar de empleo, en el cual ganaré sustancialmente más, es un trabajo más agradable, y es la oportunidad que tanto he esperado en mi vida. El problema de este trabajo es que me tendrá fuera de la casa y lejos de mi esposa e hijos durante 5 días, y solo los veré dos días a la semana. Pero ellos tendrán todo lo que anhelan!. Podremos cambiar de auto, ir de vacaciones!. Podré salir a cenar una noche a la semana con mi esposa!. Ellos se lo merecen, YO me lo merezco."

Y tomo el empleo. Un año más tarde, mi ministerio más grande en la tierra, mi propia familia, está destruida. La soledad de mi esposa la volcó al juego por internet, mis hijos no reconocen mi autoridad cuando vuelvo a casa, y, cuando están bien, no quieren ir a las reuniones de Iglesia porque dicen que es mucho mejor recuperar el tiempo perdido conmigo. Y, por mi parte, estoy tan cansado del ajetreo semanal que solo quiero dormir.

Podés considerar cómo afectan "nuestras" decisiones a los demás?. El problema de esta responsabilidad que tenemos 24 horas al día - todo el tiempo estamos tomando decisiones - es bajo la soberanía de QUIÉN las tomamos.

Soy yo quien decido qué es lo mejor para mí y los míos?. La decisión, la tomo porque soy el beneficiario directo de ella?. Soy soltero, vivo solo, ó tengo esposa y cuatro hijos que dependen de mí?.

Proverbios dice que "El principio de la sabiduría, es el Temor de Dios". Tomar decisiones depende de nuestra sagacidad, de nuestro intelecto. Tomar decisiones afecta todo nuestro ser. Pone a prueba nuestros nervios, nuestra resistencia. Porqué no dejar la resolución de nuestras decisiones en las manos de quién las resolverá siempre mucho mejor que nosotros?.

Porqué no poner nuestras decisiones importantes en las manos del Señor diciéndole "Padre, temo que pudiera afectar negativamente mi vida ó los míos esta decisión que tengo que tomar. Por favor, guiame".

Santiago 1:5

"Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada." Extraordinario, nuevamente.

El Señor nos dice, "ea, es mi deseo que seas sabio y prudente en todas tus cosas. Considerate siempre falto en en esto, pedime que YO te daré con abundancia de mi consejo. Se humilde, y considerá que lo que decidas sin mí puede impactar muy mal en la vida de los que te dí".

Ay, qué distintas serían nuestras decisiones si nos detuviéramos lo suficiente para considerar lo que Dios quiere para nosotros cuando las vamos a tomar!. Claro, vos dirás "pero hay decisiones que debo tomar en un instante, no tengo ni tiempo para pedirle a Dios que me ayude!. Bueno, bien. Tenés un punto ahí. Pero, qué tal si pensamos " Dios tiene el control de todo en mi vida y siempre estoy en comunión con Él. Vivo tratando honestamente de hacer su voluntad, mi vida está rodeada de Cristo, Él es más importante que yo". Te puedo asegurar que esa vida tuya...oh,sí. En cada tic del reloj de tu existencia Dios está presente y tomando buenas decisiones por vos.

Pero, es cierto sin dudas. En este sistema aceleradísimo en el que vivimos que prácticamente nos ahoga y no nos deja pensar - es un arma poderosísima del enemigo - todo está planeado para hacernos caer. Para que nuestra decisión que hoy consideramos simple y sencilla, dentro de un tiempo se nos venga sobre la cabeza, y nos haga ver lo imprudentes que hemos sido.

Cuántas decisiones, amigo/a hemos tomado en nuestro pasado reciente y no tanto, que aún hoy están afectando nuestras vidas, ó vemos cómo hoy, luego de tantísimo tiempo nos resultan en dolores de cabeza tremendos?. Y qué haremos entonces?.

NUNCA se puede remediar lo mal hecho, y pocas veces se puede reparar lo roto. Solo queda pedirle al Señor, en toda su misericordia, piedad y sabiduría, que nos enseñe, que nos restaure, que nos ilumine, que "cope" nuestra vida por completo y sea Él el que tenga el control de todo.

Principalmente, de nuestras decisiones. Dice Él que "hace sabio al sencillo" cuando mantenemos nuestra condición de dependencia EN TODOS los aspectos de nuestra vida. El quiere el control máximo de nuestra existencia. Y la llave de ello está en nuestro corazón. Si no queremos, Él no podrá hacerse cargo, pero si lo dejamos, todo el tiempo estaremos viendo sus maravillas, porque sentiremos en nuestra vida el soplo benéfico de decisiones tomadas con prudencia, cautela, y delante de su temor.

El Señor te bendiga.


No hay comentarios:

Publicar un comentario